Como la
mujer que soy
ni ángel
ni demonio, así me hizo la natura
y como
nace todo en el universo, nací mujer sin mi permiso
Hecha
estoy, pues, mitad de sombra, mitad de luz
Mi
corazón se alegra porque soy mujer
mil
detalles afirman que mi corazon se conforma
con
todas las señales que rinden mi cuerpo
a la
evidencia del tesoro de la plenitud de
la vida
Asumo
que debo ser una mujer
fuerte y plenamente gloriosa en su feminidad
como una
ostra cerrada que cultiva, a veces, hermosas
perlas
fuego ardiente, regazo cálido para acoger
alegrías y penas
Como
esta mujer que soy
que ríe
y llora, ama y se entrega. Mujer hecha para un hombre,
valiente
y tierna, callada cuando se encuentra
sola
y débil
espuma nacida de aguas frías y violentas
Yo sé
muy bien que soy una mujer
como el sol, sigo aquí en el lugar en que se
espera
a veces
débil, o fuerte, áspera o suave como la vida me hizo
asustada
y trémula porque nací mujer sin mi permiso.
3 comentarios:
Olá Querida Rosa!
Adorei este poema,é a face de uma mulher consciente de si! Lindo!
Por outro lado, lamento sobre a perda dos teus blogues,realmente é um trabalho de muita dedicação que se esvai assim repentinamente. Mas és forte como sua citação poética, e cá estás na retomada.
Parabéns pela bravura em continuar.
Forte abrazo,
Lecy'ns
Muchas gracias Lecy'ns. Gratifica todo este trabajo leer tus palabras. Hasta pronto. Un abrazo.
Un texto muy apropiado para el Día de la mujer.
Bellísimo y a la altura del evento.
Un abrazo
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