lunes, 17 de marzo de 2014

Declaración de guerra (Aulló como un lobo solitario









Aulló como un lobo solitario. Ella le miró sorprendida, aquella manera de chillar le pareció excesiva. ¡Qué gritos! Ella también sabía hacerlo, así que le siguió la corriente:
— Pareces un lobo en celo, idiota —chilló con sorna
— ¡Será cabrona! Si te pillo te arranco los pelos, cara boba.
Ella levantó el dedo corazón bien tieso, la uña pintada brilló un segundo.
— ¡Será desgraciada! ven aquí y verás lo que hago yo con ese dedo. —estaba lívido de rabia.
Ella apretó el acelerador y salió, dando un patinazo, no quería líos.
— ¡Hay que ver cómo se ponen algunos por un aparcamiento!

1 comentario:

David Rubio dijo...

Ja, ja, ja, Es que estamos de los nervios y ya no te digo con las colas de los supermercados. Saludos